Sinceramente, ni yo misma entiendo cómo me ha podido gustar tantísimo esta película. No soy para nada seguidora de películas melodramáticas tipo 'Lo que el viento se llevó'. Siempre me han parecido dramones romanticones sin sentido y más propios de una sobremesa marujil que películas para ver en cine o para disfrutar en casa una tarde de domingo. Pero como todo en la vida, siempre hay excepciones, y he aquí una de ellas.
A su favor cuenta que el director y guionista Baz Luhrmann es el mismo de películas de la talla de 'El Gran Gatsby' y 'Mouling Rouge' que francamente, me enamoraron, tanto por el argumento, como por la fotografía, la dirección artística, las interpretaciones y la banda sonora. Y a esto hay que sumarle además el protagonismo de Nicole Kidman que me parece una actriz de diez y sobre todo de Hugh Jackman que me encanta!! En su contra (por poner algo) las dos horas y 45 minutos de duración.
La historia sucede en el año 1939. Lady Sarah Ashley (Nicole Kidman) es una aristócrata inglesa frívola, estúpida y superficial. Está casada pero su matrimonio carece de amor, tampoco tiene hijos por lo que su vida transcurre en su cuadra de caballos.
Convencida de que su marido le es infiel, Sarah viaja desde Londres hasta Darwin (Australia) para enfrentarse a él. De forma fortuita en su camino se cruza Drover (Hugh Jackamn), un ganadero tan tosco como refinada es ella, éste le hará de guía durante sus días en Australia.
A pesar de la profunda antipatía que se profesan, las cosas cambian cuando ella se hace cargo de un joven mestizo huérfano y marginado (Brandon Walters).
La recomiendo 100%.
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