viernes, 20 de marzo de 2015

La muerte de Mikel. Imanol Uribe.


La verdad es que la carrera de este prolífico guionista y director español, que a nadie deja indiferente con su cine, comenzó con una sucesión de películas muy ancladas en temas políticos de importancia trascendental, quizá por la juventud con la que empezó o quizá por los años en los que inició su andadura (finales de la década de los 70, principio de los 80).

De estos primeros años tenemos: 'El proceso de Burgos' (documental sobre ETA enmarcado en los sucesos que lleva por título), 'La fuga de Segovia' (película sobre la fuga de presos de ETA de la cárcel segoviana en los últimos años del franquismo)y 'La muerte de Mikel, de la que hablaré a continuación y que también tiene como eje principal ETA.

Tras éstas, escribió y dirigió otras más con otro tipo de temática, hasta que de nuevo a mediados de los 90, volvió con el tema del terrorismo y es como hizo 'Días contados' de la que quizá hable en otro momento, y ahí frenó su trayectoria (a lo mejor para retomarla más adelante, aunque lo dudo, debido a la "desaparición" del grupo armado). 

No obstante, en su insaciable gusto por dejar un legado de películas ancladas a la sociedad y política española, rodó el documental de 'Ciudadano Negrín', y la película de 'Miel de Naranjas' de la que también hablaré en otra entrada futura. 

Nos centramos ahora en 'La muerte de Mikel', una de las primeras películas de Imanol Arias como protagonista, y que tras dirigir con Pedro Almodóvar 'Laberinto de Pasiones', probablemente captaría la atención del director vasco para protagonizar esta otra. 

Mikel es un farmacéutico de un pueblo cercano a Bilbao, cuyo matrimonio se ha deteriorado hasta el punto de llegar incluso a la violencia. Un día va a una sala de fiestas donde actúa Fama, un famoso travesti de la capital, con el que inicia una relación sentimental. 
Cuando Mikel fallece en extrañas circunstancias, los abertzales intentarán sacarle partido político a su muerte. 

Realmente a mi esta película no me entusiasmó demasiado, puesto que Uribe lo que hace realmente es utilizar el tema de ETA como trasfondo de un problema mayor (como sucederá posteriormente en 'Días Contados') que es el hecho de quererse y aceptarse a uno mismo tal y como se es. 

Sin duda 'La muerte de Mikel' es un ejemplo perfecto de lo grande que puede ser el dolor y la crueldad humana, y lo malas que podemos llegar a ser las personas. 

No obstante recomiendo verla, pues creo que resume muy bien el tipo de cine que firma Uribe, y que llevará su seña en esa atmósfera tan característica que abarca todas sus películas. 

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